El nuevo proyecto televisivo, que auspicia RTV Comercial, entra en la fase de preparación luego de un extenso casting por toda Cuba
A partir de un amplio proceso de audiciones, iniciado en el oriente del país y que concluyó en la Sala Atril del Teatro Karl Marx, ahora el equipo de realización del proyecto televisivo La Banda Gigante está enfrascado en el proceso de selección de los definitivos concursantes.
Cientos de aspirantes se presentaron durante el casting en todo el país. Las provincias elegidas para ser escenario de estas audiciones fueron: Santiago de Cuba, Camagüey, Ciego de Ávila, Villa Clara, Matanzas y La Habana.
Para la ocasión, jóvenes entre los 18 y 35 años, de formación académica o empírica, indistintamente, se presentaron a pruebas de improvisación, lectura de pentagrama, ritmo, armonía, entre otros requerimientos indispensables de sortear para quienes entren en un riguroso trabajo de selección.
Los más preparados protagonizarán las diez emisiones de esta nueva competencia televisiva prevista a transmitirse desde septiembre.
Bajo la dirección general de Manolo Ortega y la guía musical de la musicóloga Carmen Souto, se inicia el tránsito de los concursantes dentro de un proyecto amplio que exige rigor técnico a la par que dinamismo; de esta manera los instrumentistas tendrán que explotar todas sus capacidades artísticas.
Tras vivir extensas jornadas de audiciones que sobrepasaron las expectativas iniciales de posibles interesados, Manolo Ortega valora: “La Banda Gigante, como homenaje a aquella que acompañó a ese grande de la música popular cubana que fue Benny Moré, tendrá que exigirse ser verdaderamente merecedora de su nombre. Talento hay en el país para reverenciarla; esperamos que todo ese potencial se presente en las audiciones como única manera de regalarle luego al público el espectáculo que merece.“Será otra propuesta de aprendizaje para todo el equipo de trabajo; pero estamos listos para aprender haciendo y para ello, además del talento musical imprescindible para llevarlo a cabo, una vez más esperamos la apreciación del público, que decide las pautas del camino que iniciamos. Junto a él construimos un producto que satisfaga sus necesidades de entretenimiento, con esa necesaria dosis de instrucción y conocimiento que favorece la continuidad del proyecto”.
De esa manera La Banda Gigante ya cuenta con cimientos propios, irá creciendo en estos meses de verano cuando, mientras muchos descansan, un equipo de trabajo crea las condiciones para que las noches (posiblemente de domingo) conserven esos aires de música que no debieron haberse perdido.
La invitación queda hecha, más adelante tendremos otros detalles; por el momento, ya usted sabe: Arranca La Banda Gigante.