Mirando las últimas crónicas de Julio Acanda decidí volver a escribir sobre este colega, que ofrece lecciones de crónicas periodísticas en las emisiones dominicales del Noticiero Estelar.
Pero las últimas no fueron de estalactitas de Finlandia, el mar que rodea a Grecia o algún edificio japonés, sino de lugares históricos de Mayarí a los que llegó mediante una mula y empapado de sudor.
Nos llevó, por ejemplo, a San Ulpiano, donde Antonio Maceo libro una colosal batalla contra los españoles, luego del pacto de Zanjón y casi acabó con los soldados, perdonó a unos 25 y los dejó ir porque se habían fajado con hidalguía.
Pero también con su cámara hizo que viéramos a Preston, con sus casas de madera, originales, que se perderán con el tiempo si no se tiene en cuenta su valor patrimonial. Allí funciona, quizás, el carro fúnebre más viejo Cuba que fue armado en 1934.
Y nos enseñó la fuente inmensa, poderosa de agua que posibilita la existencia del trasvase este-oeste y cerca de allí el lugar (Farallones de Seboruco) donde habitó el hombre más antiguo de Cuba que data de seis a siete mil años atrás.
De su mano estuvimos donde según la leyenda apareció la Virgen de la Caridad del Cobre y Julio explica que los historiadores concuerdan que ese fue el lugar por el que los juanes llegaron con la tablilla de lo que sería la patrona de Cuba y que tiene su santuario en el Cobre. Pero aquel sitio, monumento nacional, está destruido. El cronista no lo cuenta, lo muestra.
Todo esto lo filmó con una camarita que siempre viaja con él, a Tokio o a las lomas del oriente cubano y luego Adrian E. Migueles, se encarga de editar. Sobre el quehacer de este profesional que tuvo un programa radial (Cosas de mi Escuela) a los nueve años y desde niño “que quería compartir historias con la gente ya fuera por radio o tv”, la joven Nayara Tardo Azaharez escribió su tesis de grado,
La crónica del domingo de la emisión estelar del noticiero nacional de televisión, entre el 2011 y 2013 es el enunciado de la investigación que en sus conclusiones dice “Podemos afirmar que Julio Acanda, a partir de diversas líneas temáticas trata de evidenciar, mediante personajes comunes, costumbres y variados acontecimientos, la identidad de Cuba, su gente, así como las curiosidades de otros contextos, diferentes al nuestro”
Él ya me había contado “Las crónicas de viaje que el público ve por televisión, en realidad son el resultado de traslados con otros propósitos, fundamentalmente académicos y personales. Me resultaría de un egoísmo extremo no compartir esas experiencias y sería una imperdonable desidia profesional, no convertir todas esas vivencias en eso que han dado en llamar crónicas, y que en realidad agrupa muchos géneros periodísticos que pasan por el tamiz de mi interpretación.”
Este domingo fue un viaje al alma de Carilda Oliver Labra que celebra sus 96 años con toda la picardía y sensualidad que han caracterizado a esa gran poeta matancera… nada, disfruté y disfruto las crónicas de Acanda, fruto de su vocación casi ancestral de contar historias.
CARTELERA DE CANALES NACIONALES
