Entrevista con el periodista Fidel Toranzo sobre su experiencia de trabajo en la Revista Buenos días
Fidel Toranzo se ha convertido en uno de los rostros más conocidos de la Revista Buenos días, donde se desempeña como conductor de forma alterna con Raúl Isidrón. Sobre la significación que esta ha tenido en su recorrido expresa: “Buenos días me ha permitido ganar en confianza en mí mismo, madurar más, investigar más sobre muchos temas, autoprepararme e intentar conocer un poquito de todo”.
¿Qué papel desempeña ese espacio en tu quehacer dentro de la televisión cubana?
-Por diversas razones llego a la televisión, otro de los grandes sueños que yo tenía y aquí se me brindó esa excelente oportunidad y ese gran reto. Un día me entero de que en la Revista Buenos días estaban buscando a redactores de prensa para trabajar en la redacción de noticias. Fui hasta la oficina del Sistema Informativo y me comunicaron que hacían falta personas. Después de hacerme una prueba, me contrataron.
“Comencé a trabajar en la redacción de los boletines nacionales, también hacía el resumen nacional, recibía a los entrevistados y preparaba las entrevistas con ellos. Así estuve cerca de dos años. En ese periodo fui madurando y conociendo más a fondo el medio que era prácticamente desconocido para mí.
“Poco a poco, en la propia revista fui asumiendo otras responsabilidades, los jueves comencé a hacer entrevistas a los estudiantes de la Federación Estudiantil Universitaria, que venían para hablar de sus actividades en la organización; también venían los representantes de la Unión de Jóvenes Comunistas y estuve a cargo de esa sección en cámara.
“Un buen día, la comentarista deportiva tuvo un asunto urgente y no había quien hiciera el segmento de deportes, y ahí fue Fidel a hacer el segmento de deportes, la peor experiencia de mi vida, porque no poseo muchos conocimientos sobre este tema. Algún tiempo después, Humberto López tuvo que salir de la revista y asumí este trabajo de ser el conductor principal junto a Raúl Isidrón, que conduce lunes, martes y miércoles y yo lo hago los jueves, viernes y sábados. Actualmente la revista también se transmite los domingos, ese día también lo hace Raúl.
“Buenos días es uno de los espacios del Sistema Informativo que mayor audiencia tiene, somos los que abrimos en cada amanecer las noticias en Cuba, somos los que marcamos la pauta, la agenda informativa en cada una de nuestras emisiones. ¿Qué tenemos que mejorar? Muchas cosas, por supuesto, la obra nunca es perfecta, ni lo será. Pero que trabajamos con mucha responsabilidad, mucha entrega, mucho compañerismo, eso sí te lo puedo asegurar.
“Son más de dos horas de información de Cuba y el mundo que se transmiten en vivo. Ya son más de cinco años formando parte de este colectivo, al cual le debo todo lo que he aprendido en la televisión”.
¿Cuánto le aportas a Buenos días y cómo la revista te ha marcado profesionalmente?
-Te podría decir, sobre todo, que me aporta un sentido crítico. Ante las cosas que no salen bien, tengo que reconocerlo, puedo ser cruel con mis compañeros de trabajo cuando las cosas no salen como deben ser. Siempre pienso en el televidente, que merece recibir un producto bueno y de calidad. El televidente no admite equivocaciones, pero bueno, como todos somos seres humanos, nos confundimos, tenemos días buenos y malos, y tenemos derecho total a confundirnos y a rectificar.
“Me gusta mucho renovar, no encasillarme en lo mismo. Me gusta que la revista sea cada día diferente, mover los espacios, los segmentos. Por qué tiene que estar fijo si la dinámica y el flujo informativo te dice lo contrario. Siempre estoy en contacto con la directora general de la emisión para proponer ideas, nuevas formas de hacer, y todo eso nos ha permitido cambiar muchas cosas para bien. Porque la revista tiene la ventaja de tener un colectivo muy joven y eso es una inyección de energía, de ideas renovadoras, un colectivo que le gusta trabajar y hacer”.
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