Entre tu y yo

Yudexi de la Torre… “La actuación es la que reúne todo lo que pasa en mí… Necesito tener otras, entrar en la piel de otros personajes”

Así nos comenta la actriz de teatro, cine, televisión y radio cubanos que desde Bayamo llegó a la capital y se ha ganado, merecidamente, la aceptación del público

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De formación autodidacta, el Colectivo Teatral Granma, el grupo Alas, el proyecto Olympia Teatro, la radio, el cine y la televisión cuentan con esta actriz de perfecta dicción y un preciso tratamiento de las contradicciones de los personajes a los que da vida.

Su aparición en la pequeña pantalla fue en la teleserie Entrega, dirigida por Alberto Luberta Martínez, con el personaje de “Hortensia”, la profesora de Historia. A partir de ahí su tránsito ha continuado vinculado a la televisión, pero hagamos un recuento acerca de la prolífera labor de esta convincente actriz.

¿La actuación fue siempre el camino para Yudexi?

“… Pues desde pequeña siempre hubo una inclinación en mí hacia el arte, mis gustos eran diferentes; prefería jugar a las cantantes, a la representación en lugar de entretenerme con “las casitas”. Creo que eso me viene por mis padres. Mi papá, aunque no vivía conmigo, tenía un bagaje cultural muy amplio, le gustaba mucho leer, tocaba la guitarra, creaba décimas, y mi mamá es una lectora empedernida. Así, desde pequeña, la recuerdo como leía los libros y me contaba las historias completas. Pasó por ejemplo con El Tábano y mientras ella estaba sentada en un sofá, yo en el piso, recostada a ella, y de ese modo me narraba las historias y las vivía. De hecho, aun hoy hace lo mismo, ve una película y tiene la necesidad de contarla con esa vehemencia.

“De ahí creo que me viene esa necesidad de tener otras vidas, entrar en la piel de un personaje. Y sí había esa sensibilidad, pero no planes de dedicarme a la actuación, todo parecía indicar que estudiaría sicología cuando terminara el pre universitario. No pudo ser sicología en ese momento porque llegó algo muy importante a mi vida, que se llama bebé. Y cuando el niño había cumplido el primer año, una persona que me conocía me dijo que necesitaban una actriz en el colectivo Teatral Granma, de la ciudad de Bayamo, y me buscaron. Realmente en esa época yo declamaba en la Casa de la Cultura porque, repito, junto a la sensibilidad estaba la necesidad. Así, hasta la primera vez que pisé un escenario, ya nunca más me pude desprender.

“Y hoy te aseguro que me gustan todos y cada uno de los medios, sencillamente porque la actuación es la que reúne todo lo que pasa en mí, es quien salva todas mis urgencias”.

Yudexi, ¿cómo defines la relación que estableces con los personajes?

“Esta relación es muy bonita, los siento frente a mí, y trato de descubrir qué tienen o no de mí, y qué visión tengo yo de ellos. He tenido la suerte de incorporar personajes importantes de la Historia como Sor Juana Inés de la Cruz, Frida Kahlo, María Fonseca, una mujer que existió en La Habana, todos personajes fuertes, protagónicos, y los voy mirando desde la visión de Yudexi; pero tratando de escudriñar en el alma de ellos para entonces sacar lo mejor y peor que tengan para fusionarlos y así tener un mejor resultado.

“Eso sí, una vez que aparecen les entrego lo mejor de mí, me apasiono, sufro, soy feliz con ellos. Estoy cocinando e imagino cómo lo harían ellos, frente a mis hijos me comporto igual. Sean positivos o negativos trato de sacar la mejor filosofía de vida que puede tener Yudexi para ver en qué espacio caben ellos y una vez ahí magnificarlos, sublimarlos. Ciertamente a todos hay que estudiarlos a fondo para conocer, realmente, qué dicen y qué quiero que digan, para así perfilar el mejor punto de vista que queremos que llegue al público.

“Inevitablemente me enamoro de ellos, y de ellos, aprendo mucho; no me quedo con visos, una vez que los dejo quietos, dormidos; pero sí estudio sus filosofías de vida porque cada uno de estos personajes tiene un punto de vista sobre la existencia. Y eso es rico: vivir y tener todas esas esencias que, igualmente, van a ayudar en la vida personal”.

Te conocimos en televisión con “Hortensia” y a partir de ese rol has ganado un importante reconocimiento del público.

“Me cuesta trabajo reconocer— valga la redundancia—reconocimientos para conmigo. He logrado en este tiempo que me conozcan en todo el país porque tuve la suerte de llegar a la televisión nacional, a la plataforma que es la telenovela, en ese horario estelar que la mayoría de las personas esperan. Le agradezco infinitamente a Osvaldo Doimeadiós y a Luberta que tuvieron esa deferencia y generosidad de contar conmigo. En el caso de Doime me llamó a mi casa, sin antes haber cruzado una palabra conmigo, para proponerme ese personaje de “Hortensia” porque me había visto en Café amargo, y en el Teatro Mella interpretando a Frida Kahlo y felizmente le quedé en la memoria, y me visualizó como “Hortensia” en Entrega.

“Esa llamada para mí ya constituía un premio y sin pensar en las reacciones secundarias y en todo lo que tendría después que pasar para moverme a La Habana, con los ojos cerrados dije que sí, en tanto era una experiencia que había soñado alguna vez. Terminando Entrega, me llaman para Vuelve a mirar; me presenté con susto, la verdad, no conocía a su director Fiallo, ni a la mayoría de los actores con los que trabajaría. Pero también lo agradeceré profundamente.

“De ambos rodajes aprendí muchísimo; crecí no solo como actriz sino como persona, aun cuando  me cuestione cosas y aun cuando no esté satisfecha con el resultado de alguno de los dos personajes, me siento muy feliz porque tuve el privilegio de compartir con muchos actores a los cuales siempre había admirado y respetado como Nancy González, Patricio Wood, Ray Cruz…Paula Alí, Roque Moreno, Breñas, Danay Cruz…Igualmente pude compartir con excelentes equipos técnicos que  te  hacen comprender todas las adversidades a las que tiene que enfrentarse el ICRT para poder llevar a la pantalla una telenovela.

“En lo personal es un esfuerzo que demanda mucho de mí, primero porque tengo que estar lejos de casa, de mis dos hijos, uno de ellos tiene 33 años, pero tengo un adolescente que acaba de cumplir  18 y entró en la Escuela de Arte y reconozco que soy sobreprotectora y me gusta pasarle la mano a todo, y es un poco engorroso;  no obstante, le agradezco a Corina Mestre  y a Marta Ulloa que, por enseñanza artística, al ser yo profesora de la escuela de arte de Granma me dieron la posibilidad de instalarme en el Hotelito de la Enseñanza Artística, y eso me dio tranquilidad; no obstante,  estar lejos casa deja un cierto dolorcito en el alma.

“Ahora puedo mencionar también que tuve muchas personas que me tendieron una mano, desde un café, un abrazo, una conversación, o alguna salida. Gracias a todos porque me arroparon y así pude lograr eso que ahora pueden estar disfrutando en pantalla.

“La televisión exige tener todos los sentidos aguzados para saber qué existe e hiciste en la primera locación y luego cuando tienes que volver a ella, aun cuando han transcurrido quince días o un mes, hay que ver entonces dónde quedó la emoción, las ganas…. En Vuelve a mirar, por ejemplo, sucedió que quedó trunca por siete meses y luego de ese tiempo viviendo otra vida por el miedo y la necesidad de cuidarse ante el Covid-19, se reanuda el rodaje y hubo que vestirse nuevamente de “Sara”, en mi caso, y reanudar esa trayectoria de emociones que iba llevando. Por suerte se trataba de un equipo unido, los actores nos ayudábamos tanto que fue posible retomar las grabaciones y terminar antes de lo previsto”.

A partir de esta experiencia televisiva cuánto te han marcado los personajes de “Hortensia” y ahora “Sara”

“Parto del hecho que ha sido una experiencia totalmente nueva pues desde mis inicios estuve vinculada al teatro, y ahí me quedo sin reservas de ningún tipo, subo al escenario y allí me desgarro a como dé lugar. A mi juicio en la televisión tienes que medir las fuerzas, la entrega, tienes que ser más meticulosa para ir acomodando las emociones a favor del crecimiento del personaje.

“Agradezco que el debut en televisión haya sido con un personaje vinculado con un tema tan importante como la educación, y que “Hortensia” fuera quien le pusiera las trabas a ese profesor que tenía todas las ganas, y es que así puede ocurrir exactamente. Existen muy buenos profesores que entregan el saber, pero tienen que ser más flexibles en estos tiempos, donde el educador tiene que serlo del saber y al mismo tiempo del ser.

“Y de “Sara” no puedo hablar mucho porque aún estamos en los comienzos, pero me enseñó que la sensibilidad y ser buena persona salva ante cualquier adversidad, y más he podido descubrir cuanto el público me aprecia. He encontrado amistades que sin vernos cara a cara me escriben, animan, y eso es vital en estos tempos tan difíciles donde hay que sublimar cada minuto de felicidad e irradiar a los que te rodean.

“Así que en medio de tiempos de miedo e incertidumbre hay muchas personas que dedican un tiempo de sus vidas y me llaman, asisten, critican, y si por ejemplo un día uno amaneció con la cabeza un poquito baja, aparece una persona que se acercó y logró que saliera el sol para mí. Ese reconocimiento que me ha llegado hasta de los niños no lo suple nada”.

La convicción de que las aguas tomarán su cauce es la que permite a Yudexi de la Torre seguir andando entre planes y mucho trabajo. Supimos que hay posibilidad de verla en una serie para la pequeña pantalla, pero por lo pronto hay que esperar, sigue viviendo en su Bayamo querido, trabajando en pequeños proyectos sin detenerse. Tal parece que esta última palabra no tiene nada que ver con ella desde que la actuación tomó las riendas de su vida. Felizmente La Habana la espera para verla asumir otro personaje que desde su temperamento y rigor también encontrará un buen espacio en el recuerdo de cubanas y cubanos.