La inauguración de nuestra primera televisora, el 24 de octubre de 1950, potencia el rol de Cuba en la Industria Cultural de Las Américas.

De los vecinos del Norte aprendimos las prácticas y códigos televisivos y, en consecuencia, entre nuestros primeros balbuceos creativos hubo muchas imitaciones.

Sin apenas tiempo para añejar el vino, descubrimos que sus esencias culturales eran muy disímiles a las nuestras y, como hacemos con la mayoría de las influencias que arriban a esta bendita tierra, nos lanzamos de lleno a esa aventura que Don Fernando Ortiz identifica como transculturación:

En buen cubano: volcamos a sus moldes, estructuras, formatos y fórmulas la enjundia hispánica y africana latente en nuestras artes escénicas y literarias.

Así surgió en Cuba el modelo latino de la tipología radial-televisiva anglosajona, cuya comunidad de raíces culturales, con el resto de las naciones de habla hispana –y hasta portuguesa-, propulsó el intercambio mediático-cultural fuera de fronteras.  

De esta manera, por obra y gracia de nuestro ingenio, nosotros -los alumnos del Norte- nos convertimos en maestros de los latinoamericanos.

Aunque la historiografía mediática continental ignora este descomunal aporte, lo cierto es que en los foros habaneros aprendió y entrenó la mayoría de los especialistas de las primeras televisoras en Venezuela, Puerto Rico y Colombia, donde por añadidura nuestros compatriotas alcanzaron notoriedad desde sus propuestas fundacionales.    

Nuestro primer paso en la expansión televisiva fuera de fronteras data de 1951, cuando CMQ S.A. funda un consorcio internacional al  que tenía  previsto proveer con las copias fílmicas de sus dramas, humorísticos y musicales. Por añadidura, junto a su filmografía, embalaba la estadounidense doblada en Cuba.

El siguiente paso lo observamos en Puerto Rico:  

Desde los años cuarenta pasados nuestra narrativa radial se esparció por la región. En Borinquén hay registros del intenso flujo de especialistas y artistas cubanos que transitaban entre las radioemisoras de San Juan y de La Habana. 

De ello da fe RADIO WAPA, La voz del caribe - la mayor empresa radial boricua-donde directivos, creativos, intérpretes y comunicadores cubanos aportaron experiencias, saberes y talentos, y a la que CMQ Radio y publicitarias radicadas en La Habana suministraban guiones a granel.

 

Antes de fundarse en esa vecina isla la televisión, allí captaban las imágenes de algunas plantas nuestras y la señal de CMQ TV en Oriente se veía en Jamaica.

En junio de 1953, tres radioemisoras boricuas (Radio EL MUNDO, WIPR y WNEI), con el respaldo de la RCA y la GENERAL MOTORS estadounidenses, solicitaron licencia para operar televisión.  

El Boletín CMQ [1] -en Noticias Internacionales: Centro y Sur América- comentaba sobre la primera de ellas (WKAQ. Canal 2 TELEMUNDO): Cuba con 5 millones de habitantes en tres años ha fundado cinco plantas, mientras los puertorriqueños con 2.5 millones tienen dos. -A televisora por millón de habitantes- Solo transmiten películas cortas en horarios nocturnos.

Su millonaria inversión -entre los $3 y 4.1 millones- hizo de ella la `planta más poderosa, mientras que la ubicación de su torre en la cima de la montaña La Marquesa - a 50 kilómetros de San Juan- le dio cobertura total en la isla y la mayor teleaudiencia.[2]  

El 28 de marzo de 1954, la empresa propietaria de RADIO WAPA, La voz del caribe emite el patrón de pruebas de WAPA TV (Canal 4)[3] -segunda televisora isleña- cuyo patrón de pruebas se ve en Santiago de Cuba.

El 15 de abril siguiente, la familia Mestre Espinosa de Cuba adquiere el 20% de sus acciones; convirtiendo nuestra participación en pieza clave de la competencia frontal con la planta fundadora.

Cuando en mayo siguiente, el Canal 4 inicia operaciones tiene como Director General y de Programación al experimentado cubano Delfín Fernández[4] , a quien le secunda su coterráneo Luis Dury (Jefe de Producción).

Al año siguiente, la relación de nuestros compatriotas se engrosa con José Sánchez Torres, el Ing. José Torres Miguel A. Martínez Castellanos, Gilda Trinidad de Domínguez y finalmente con Manuel y Rigoberto Rodríguez -hasta entonces ejecutivos en CMQ TV-.

El Canal 4 suplió sus limitados recursos tecnológicos y financieros con ejecutivos rivales, con nuestros ejecutivos y programas.

La venta de los kinescopios del Canal 6 (CMQ TV) en Puerto Rico fue de tales proporciones que algunos productores locales organizaron un movimiento de protesta. Ello no impediría -entre tanto- el estreno de Estudio Cristal, Historias apasionantes, Ciclorama, Ellos dos y alguien más. [5]

WKAQ. (TELEMUNDO. Canal 2) su rival, le enfrenta con los kinescopios norteamericanos y, colateralmente, compra relatos a algunos de nuestros más notorios escritores.[6]

Gradualmente, las razones culturales obvias hicieron que los kinescopios norteamericanos de WKAQ, TELEMUNDO, fueran desplazados por los cubanos.

En junio de 1955, Delfín Fernández viaja a La Habana, donde presenta su renuncia en WAPA TV, a Goar Mestre. De inmediato, asume la Dirección General de la empresa rival: TELEMUNDO (Canal 2), donde permanece algo más de un año. [7]

En 1956, Ángel Ramos- propietario de TELEMUNDO (Canal 2)- intenta una alianza con Amadeo Barletta en Cuba. En diciembre se supo que Manuel Fernández -dueño de nuestra Radio Progreso- planeaba sumarse a este proyecto.   

Para la historia queda la primera inversión de capital financiero fuera de fronteras de la televisión iberoamericana, realizada por cubanos. Tras 1959, otra oleada de artistas y especialistas cubanos colmarían la televisión portorriqueña. Pero esa es otra historia.   

  

 

[1] Año III Nro. 13. Páginas 14-15. 1953.

[2] En San Juan construyen amplios estudios y locaciones. No produce programación en vivo. Paga miles de dólares mensuales a artistas como Mapy y Fernando Cortes; David Pollinger, Don Mayo, etc. No avizoraba ganancias hasta 1956. Periódico Información. 21 de agosto de 1954.

[3] Actualmente propiedad de Chancellor Broadcasting.

[4] Experimentado hombre del teatro, la radio y el video. Tras su formación especializada en el audiovisual trabajó en Estados Unidos y en Europa: Mayo de 1950: EE. UU: Primer cubano egresado en Dirección de TV. Enero 1951: UNION RADIO TV (CANAL 4) Jefe Producción y Programas. Junio 1952: RHC, Cadena Azul: Productor y Jefe Programación. Julio 1952: Dirige su Consejo Producción. Febrero 1953: RHC. Renuncia por rebaja salarial. Canal 11. Director de programas hasta junio 1953. EE.UU. OHIO: WSPD, Estudia video. Hasta abril 1954: CMQ TV -junto a Luis Hernández de Hita-.

[5] En noviembre de 1954, la Procter & Gamble de Puerto Rico estrena en la televisión boricua kinescopios de conocidos proyectos cubanos: Cuba _ Estudio 15 (allá Su programa Lavasol) y El show de Dick y Biondi. El tercero Una cita con Camay lo escenifican en estudio su pareja estelar Rafael y Esther y producido por David Polinger. [5]  Bohemia 21 noviembre 1954.

[6]  Ejemplo: Espacio WKAQ-2, desde el 26 de octubre de 1954, escenifica Al despertar de la vida de nuestro Roberto Garriga; interpretada allí por Rafael Enrique Saldaña, Esther Sandoval y Alicia Morera.

[7] En enero de 1956: Asiste a Convención NARTB. CHICAGO. Poco después renuncia en Puerto Rico y se asocia a Hernández de Hita en una productora de programas televisivos.

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