La historia de Gaspar Pumarejo Such en nuestra Industria Cultural fue diversa y amplia. Sin embargo, al paso del tiempo, la percepción sobre sus aportes, suele reducirse a la fundación de nuestra primera televisora (Unión Radio TV. Canal 4), inaugurada el 24 de octubre de 1950.

Español radicado en Cuba desde temprana edad, entre los años treinta y cincuenta del siglo pasado, fue locutor radial, publicista y promotor cultural antes y después de protagonizar  numerosas primicias en el potente sistema televisivo comercial, estructurado en La Habana entre 1950 y 1958.

Cuando a mediados de 1951, Pumarejo vendió al cineasta Manuel Alonso el Canal 4 y su casa matriz -la cadena nacional Unión Radio-; este funda la empresa Televisión Nacional; también de vida efímera. Tras esa operación comercial, los hermanos Gaspar y Enrique Pumarejo fundaron una publicitaria. Todo parecía indicar que se divorciarían de la televisión; pero no fue así.

Algunas fuentes refieren que Gaspar hizo conducción y producción televisiva en Televisión Nacional, aunque aportan poca información.

Lo evidente y notorio es que desde la fundación del Canal 2 (Telemundo) -18 de febrero de 1953- nuestra tercera cadena interprovincial de video; Gaspar Pumarejo retorna con un empuje notorio en el quehacer televisivo; como productor de la primera revista informativa televisiva cubana: El Mundo en Televisión.

Este novedoso formato televisivo -inspirado en la práctica estadounidense- replicaba en imágenes en tiempo real  las secciones fundamentales del periódico El Mundo.

Este importante diario pertenecía desde hacía años a Amadeo Barletta; mafioso y fascista italiano devenido el único propietario y máximo ejecutivo de nuestra televisión comercial  proveniente de la prensa plana. Hasta inicios de los años sesenta, El Mundo en Televisión brillaría con luz propia.  

Muchas fuentes argumentan que Barletta, resentido de quien había sido su rival en el negocio de la importación de autos estadounidenses, se involucra en los medios de comunicación electrónicos en revancha con los Mestre Espinosa de CMQ.

Quienes conocieron a Gaspar Pumarejo afirman que este rechoncho santanderino tenía una personalidad inquieta y que la autoría intelectual de sus proyectos muchas veces correspondía a otros. Propias o ajenas, a Pumarejo le corresponde el mérito de establecer primacía en algunas de ellas con resonante éxito; pese a su descalabro reiterado en algunos negocios.  

Al paso del tiempo, Gaspar Pumarejo  se relaciona directamente con las singularidades de la inauguración y operación de la cadena interprovincial Telemundo.

En 1952, Barletta funda Radio Televisión El Mundo –a donde emigrarían el Canal 4, Televisión Nacional y la cadena nacional Unión Radio–  y desde la cual organiza la fundación del Canal 2 (Telemundo). Logrado este objetivo el 18 de febrero de 1953, deja de ser asesor financiero en esta empresa y deviene Presidente y propietario mayoritario de la televisora. Inmediatamente después, disuelve esta sociedad.

Su premura para fundar Telemundo, solo alcanzo para construir un moderno e imponente edificio que rivalizaba con el de Radiocentro (inaugurado por los Mestre de CMQ desde 1948, con el que inaugura la urbanización de La Rampa) a pocas cuadras de distancia. Refieren los entendidos que los estudios o foros de Telemundo, fueron los más novedosos en tecnología, mayores y más funcionales que los del potente CMQ TV (Canal 6).  

La gran debilidad de Telemundo fue la carencia de personal técnico-artístico propio; que suple en su primera etapa con el capital humano del Canal 4 (Televisión Nacional). También se apropia de sus mejores proyectos audiovisuales que difundirá en ambas frecuencias. Al disolverse Radio TV El Mundo, Barletta pierde; junto a sus programas, el caudal de  hombres y mujeres experimentados y talentosos.

Gaspar Pumarejo identifica su gran oportunidad y crea la primera y más importante productora audiovisual –la primera entidad independiente a las empresas mediáticas existentes en Cuba hasta 1959-:

En Escuela de Televisión, fue copropietario  -junto al actor y dramaturgo Otto Sirgo- director general y comunicador. Esta productora realizó la mayoría de las horas de televisión emitidas por Telemundo hasta su desaparición en 1959, mediante la renta de los espacios difusivos de esta televisora. Su vasto catálogo incluyo dramas, humorísticos, teatros, variedades, contenidos utilitarios, en revistas culturales-comerciales tan novedosas como Hogar Club, entrevistas, eventos deportivos e informativos; muchos de los cuales tomaros de sus precedencias en la Industria Cultural o establecen primacías.

Escuela de Televisión fue su proyecto de mayor aliento, consistencia y aporte a nuestra televisión. Pudo constituir el broche de oro de su periplo televisivo en Cuba; pero hizo mucho más. 

En 1958 –nuevamente– le arrebata una importante primacía televisiva a los Mestre de CMQ, cuando funda el Canal 12 (Telecolor), primera televisora fuera de los EE.UU., que operó y emitió sus señales con tecnología a color.

En ella, Pumarejo volcó muchas de las experiencias aplicadas en los informativos de Unión Radio; y orienta la programación de Telecolor a la información y a la crónica social; otro de sus aportes.

En ella, prioriza la grabación en exteriores con cámaras fílmicas de reportajes, documentales, entrevistas y hasta un noticiario de frecuencia diaria que retó a los espacios de las televisoras tradicionales que alterna con escasos proyectos realizados desde los foros del Hotel Habana Hilton. –Luego Habana Libre-.   

Cuando al triunfo de la Revolución sus propiedades fueron intervenidas por el Estado, emigra a Puerto Rico. En una televisora de San Juan, organiza, dirige y conduce por muchos años  Pumarejo y sus Amigos; proyecto estrenado años atrás en Escuela de Televisión en el Canal 2 (Telemundo) donde se destaca como promotor cultural de excelencia. 

 

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