
Tras su contacto con Vicente Revuelta, estrena El trac, de Virgilio Piñera, espectáculo al que volvió en varias ocasiones. En 1998 se vincula a Argos Teatro, fundado por Carlos Celdrán, en otra fase destacada de su trayectoria. Con Argos estrena El Alma Buena de Se Chuán, La señorita Julia, Stockman: un enemigo del pueblo, y Vida y muerte de Pier Paolo Pasolini, confirmando su amplio rango interpretativo.
En el año 2001 pasa a Teatro El Público. Bajo la guía de Carlos Díaz aparece en La Gaviota, La Celestina, Fedra, Calígula, El otro cuarto y otros títulos. Da clases en el Instituto Superior de Arte y dirige La otra orilla, del Premio Nobel Gao Xingjian. Dedicó sus últimos años a la compañía que fundó, Impulso Teatro, con la cual estrenó obras como Insultos al público, Balada del pobre B.B o La excepción y la regla.
En el cine actuó en filmes como Entre ciclones, Kangamba, El cuerno de la abundancia y la muy gustada e irreverente Juan de los Muertos. Fiel a los legados de Vicente Revuelta, Bertolt Brecht y otros maestros esenciales de la experimentación y el teatro como espejo crítico del ser humano, deja una ausencia que sus espectadores y amigos lamentarán profundamente.