Detalles de la tercera temporada de La casa de Papote, y en consecuencia de los próximos proyectos que trae consigo el prestigioso grupo teatral Teatro Tuyo.
Nacido en “El balcón del Oriente cubano”, el espacio infantil La casa de Papote logró trascender el gusto local para convertirse en un proyecto nacional por ahondar en valores universales con tal acierto que lo convierte en referencia de buen hacer; no solo por acercarse a la inquietud infantil, sino también por saber hurgar en la adulta y necesaria reflexión.
Lo cierto es que La casa de Papote, proyecto que nació como respuesta a la convocatoria del Consejo Nacional de las Artes Escénicas, en el verano de 2020, para llevar la obra de Teatro Tuyo a la pantalla de la televisión, regresa a ella con su tercera temporada. Ernesto Parra “Papote” al frente de su tropa de sueños, unido a la realización de Dalgis Román y su equipo, igual de creativos, han sabido unir la esencia del teatro con la magia del audiovisual para crear un universo donde la ficción representa la afirmación vívida de cómo encaminar cada empeño, haciendo que prime en cada uno el corazón.
A propósito de este retorno a la dinámica televisiva, la propia Dalgis Román nos comenta:
«Esta tercera temporada de La casa de Papote nos ha tomado más tiempo y empeño. Su producción, reto a la creatividad, confirma la madurez del equipo. Sus guiones, de exquisita y sintética dramaturgia (como toda la obra de Ernesto Parra) aguardaron desde el mes de julio del pasado año hasta mayo del presente, cuando grabamos en Las Tunas, sorteando horarios de apagones programados y con las ganas multiplicadas. Ya estamos en fase de posproducción y el estreno llegará a la franja infantil del Canal de Todos, en la primera semana de diciembre».
¿Cómo está conformada esta temporada y qué la distingue?
«En esta oportunidad se trata de 20 capítulos que se distinguen por una mayor participación actoral, pues incorporamos al elenco los egresados del primer curso de la Escuela Nacional de Clown: muchachos muy jóvenes que son hijos legítimos de esa obra de amor con nariz roja. Da gusto, enorgullece verlos.
«A La casa… le han nacido otros personajes; significo de manera especial el títere que inspirara “Papote” a los maestros Zenén Calero y Rubén Darío Salazar, quienes abrazaron el reto con inmediatez y lírica belleza. Diseñamos nuevos espacios que acercarán al público infantil y a las familias a la estremecedora mirada del clown y a su aparente absurda resolutividad frente a temas que cobran matices complejos en el escenario actual de nuestras vidas: por ejemplo, “Papote” vende su casa, y así otros temas con los que seguiremos apostando por educar y entretener de manera divertida, y en igual proporción.
«Garantizamos las sorpresas, los recursos que ofrece el audiovisual se han integrado con respeto a la estética que identifica a nuestros protagonistas en la escena cubana; pero nos lanzamos a la aventura de visibilizar lo que en el teatro queda al imaginario, y que en televisión se traduce en hermosos colores, efectos y una banda sonora hermosa y vasta que complementa la entrega actoral.
«Este hogar, que resulta ya más conocido, se multiplica en una peña estrenada en meses anteriores y será feliz convite para dar la bienvenida a un lugar lleno de magia y bondad. No queremos detenernos, por eso apostamos por los sueños y los hacemos posible juntos».
¿Quiénes componen el equipo de trabajo? ¿Cuánto sientes que ha crecido el espacio y hacia qué nuevos rumbos se dirige?
«Seguimos siendo la misma familia, así es que rodarán idénticos los créditos al final de cada capítulo y esa es otra de mis alegrías. El Grupo de Animados de Cubavisión, al que pertenecemos, sabe cuánto quieren los niños a “Papote”, por eso hemos conseguido que el proyecto siga creciendo, y el desempeño de cada especialista denota el compromiso y disfrute en la parte que le toca”.
¿La mayor satisfacción que te ofrece La casa…?
«Es sincera la gratitud que sentimos y siempre hacemos extensiva a TunasVisión, aunque esta será la última temporada grabada en “El balcón del Oriente cubano”, pues la multipremiada agrupación teatral y su escuela se han mudado también a la capital. Aunque sostengo por experiencia de vida que ¡Lo que es tuyo no se va!»
Por lo pronto, mientras se produce estos imprescindibles cambios, se confirma la salida al aire de esta Casa que mantendrá sus puertas abiertas al buen hacer y crecer.
CARTELERA DE CANALES NACIONALES
