En pantalla

Interpretado por el fuera de serie Michael Fassbender, y la no menos brillante Carey Mulligan, el filme será exhibido durante la programación de verano de la televisión

Fotograma de Vergüenza, del británico Steve McQueen, con Michael Fassbender en el papel protagónico. Foto: Fotograma de la Película

Hace algo más de diez años el realizador británico Steve McQueen tocó alturas al dar a conocer Vergüenza, la historia de un adicto al sexo que procura contenerse y no puede. Interpretado por el fuera de serie Michael Fassbender, y la no menos brillante Carey Mulligan, el filme será exhibido durante la programación de verano de la televisión.

Fassbender interpreta a Brandon, que vive en Nueva York, tiene un buen trabajo y pinta de andar por la vida sin tropiezos, en especial en lo que respecta a las relaciones sexuales (que no sentimentales) con las mujeres. En una escena clave, ya avanzado el filme, Brandon le dirá a una nueva conquista, mientras comen en un restaurante, que el matrimonio es para él una invención social y, al igual que sucede con los vínculos  estables, puede ser perjudicial a su estilo de vida. Por lo tanto, nada de involucrar sentimientos, o de estar dando explicaciones, pues  ello dañaría su privacidad. Todo un estilo de vida y, sin embargo, a medida que avanza la trama, el espectador irá descubriendo que el protagonista sufre.

Las escenas sexuales a las que recurre con total justificación artística Steve McQueen (Doce años de esclavitud) buscan la introspección sicológica del personaje. De ahí que haya que estar atentos a miradas, voces, reacciones emocionales, ángulos de la cámara, todo en función de explorar la naturaleza humana de Brandon, una mezcla de impulsos y negaciones transcurriendo bajo la misma vergüenza que da título al filme. Y está su hermana Sissy, también desbordada en el sexo, y cuya repentina aparición representará un embrollo para él, que verá deshecha tanto su privacidad como su rutina de vida. Sin olvidar que ella encarna un pasado que Brandon no está dispuesto a reasumir.

 ¿Qué sucede con estos hermanos que parecen haber escogido un modo de vida libertino creyendo que es lo mejor de la vida, y luego se atormentan, se hostigan, se acosan y, sin embargo, siguen adelante porque sencillamente no pueden parar?

 Hay un pasado turbio en la vida de ambos que el Director no evidencia, pero hace presuponer. Corresponde entonces al espectador elucubrar misterios e introspecciones, mientras Brandon va de una mujer a otra, ya sean prostitutas a domicilio u ocasionales presas que encuentra en su camino. A la viva entonces con los desbordes afectivos de su hermana Sissy, a los diálogos de Brandon con ella, a la supuesta frialdad de él, a las pocas veces que intenta sonreír y en su rostro aparece una sombra inclasificable, a sus expresiones cambiantes cuando está en plena y delirante función sexual. ¿Estará disfrutando Brandon? El filme de McQueen, conocido él por tratar temas que otros evaden, es un excelente acercamiento a un asunto del que los hombres prefieren no hablar, o hablar poco; de ahí que Vergüenza haya sido recibido con mayor entusiasmo por parte de las mujeres.