Yailen Insua Alarcón, directora de la revista informativa, valora cuán importantes resultan los cambios en este espacio
Con la energía propia del adolescente, el colectivo de la quinceañera revista BuenosDías anda agitado. Por eso, esta entrevista se hizo a la carrera, en el descanso que tuvo la joven directora Yailen Insua Alarcón entre dos reuniones. Apenas eran las 9:15am y ella ya había vencido el reto más extenuante de sus jornadas laborales, velar porque la primera emisión informativa de la Televisión Cubana salga al aire con la calidad necesaria.
Desde hace alrededor de cuatro años tiene la responsabilidad de dirigir Buenos Días. Suaún escasa experticia en esta función la debe al tránsito por el Sistema Informativo de laTelevisión Cubana, donde comenzó a laborar tras cumplir su preparación como cuadro profesional en el secretariado nacional de la Federación Estudiantil Universitaria.
“Graduada de Comunicación Social, llegué aquí prácticamente sin conocer nada de Periodismo. En Buenos Días pasé cuatro meses como redactora reportera, luego fungíalrededor de ocho meses como jefa de redacción, y a raíz de la salida del director anterior me nombraron directora en funciones. Luego me quedé en el cargo”, relata la joven sobre sus inicios en el medio televisivo.
Para ella el colectivo ha sido fundamental en su formación como periodista, “en la marcha he aprendido a ser a la vez cuadro de dirección y periodista. En eso me han ayudado mucho las personas que más tiempo llevaban haciendo la revista, también los editores. A veces les entrego el material para que editen el trabajo y luego solo reviso. Tengo que confiar bastante en ellos. Me han aportado igualmente periodistas de experiencia que han transitado por el espacio, así como los recién graduados”.
Recalca que nunca ha dejado de ser periodista para ser directora. “Siempre he llevado las dos funciones de la mano. En algún momento saldré del cargo para ser reportera: lo que realmente deseo”.
Esa razón y el sueño no realizado de estudiar Medicina, alientan su interés en los temas de la salud, a partir de un enfoque diferente al que prevalece en el Sistema Informativo.Así asume la realización de Espacio Vital, donde ahora inserta a los periodistas en provincia y a corresponsales en el extranjero. “Es una sección que me ayuda a intercambiar con los televidentes que piden temas, eso me sirve para formarme mejor como periodista”, considera.
Asimismo refiere su participación en proyectos de realización de documentales, uno de ellos enfocado en el rol de los jóvenes en las transformaciones del país. En tal sentidoapunta que cuando se desempeñó como directora general del canal de la II Cumbre de la Celac, pudo trabajar con muchos jóvenes y juntos alcanzaron muy buenos resultados. “Considero muy importante preponderar el papel de los jóvenes. Ellos son el puntal del informativo y de la revista”.
Respecto a las transformaciones que desea para el programa, señala que “aunque ha avanzado un poco, le falta mucho por cambiar, tiene que dejar de ser un gran noticiero y retomar el carácter de revista. Me gustaría que en vez de uno principal, aparecieran dos o tres conductores y entre ellos hubiera una dinámica diferente, como sucede en todas las revistas de este corte en el mundo. Quisiéramos que los contactos con las provincias fueran puntuales, no por prescindir de ellos, pero sí que ocurrieran para comunicar un tema de gran interés para la población. A veces presentamos temas de provincia que son muy puntuales y en ese momento puede que la teleaudiencia nos desconecte.
“Sobre todo debemos escuchar mucho a los televidentes, ellos te dicen si estuviste bien o mal, opinan incluso hasta de tu ropa, piden que te recojas el pelo, esas sugerencias nos hacen mucha falta”, subraya.
Igual advierte la necesidad de lograr mayor cantidad de contactos en vivo, lo cual sucede con más frecuencia 'últimamente, pues en los eventos nacionales y algunos internacionales siempre insertan reporteros que hacen segmentos de tres a cuatro minutos. Así lo hicieron durante Universidad 2014, la Feria Internacional de La Habana, el congreso de los Comités de Defensa de la Revolución, y repetirán la experiencia mientras sesione el de la Federación de Mujeres Cubanas.
Según explica, “esos reporteros informan lo sucedido el día anterior y lo que sucederá en ese momento. Somos el primer contacto informativo de la gente cuando se levanta. Quien no ve la revista, por lo menos la escucha, pues después de levantarnos, encendemos el televisor, vamos haciendo las tareas de la casa y escuchamos por dónde va el mundo”.
En busca de un sueño
“Aspiramos a dejar de ser el sistema informativo y convertirnos en el canal de noticias que soñamos. Trataremos de que la revista disponga de más tiempo en pantalla, de incorporarle nuevas secciones y miradas diferentes. Estamos trabajando para cambiar la escenografía pero nos cuesta mucho trabajo.
“También nos encontramos inmersos en el rediseño gráfico para que realmente puedan apreciarse los cambios. Como soy graduada de Comunicación, sé que la comunicación visual es muy fuerte aunque las personas no lo sepan.
“A veces modificamos mucho internamente pero apenas se nota porque continuamos mostrando el mismo set, los mismos spots y las personas piensan que la revista no ha cambiado. En verdad es muy dinámica. Quisiéramos estar en pantalla por lo menos dos horas o una más”.
Epílogo necesario
Por esas felices coincidencias del destino, ahora las féminas representan la mayoría del colectivo de Buenos Días, cuya primera transmisión ocurrió el 8 de marzo de 1999.
También debe resaltarse que hoy dirija este espacio una mujer convencida de que tanto ella como sus compañeras son altamente valoradas en el Sistema Informativo en general. Menciona con gran regocijo que puede contar todavía con fundadoras de la revista informativa, entre ellas dos editoras.
La entrega y valía de las profesionales, especialistas y técnicas que laboran en nuestra televisión se resume en las siguientes palabras de Yailen Insua: “Aquí se trabaja 24 horas y es increíble ver cómo mujeres que tienen la responsabilidad de atender su casa, asisten al ICRT cada día”.