Además, discutieron la necesidad de masificar la experiencia a través de un programa de interacción directa con el público donde se debatan los materiales desde la estética, la ideología y la calidad en el audiovisual.
En Cuba ya se puede hablar de un proceso de desarrollo del audiovisual independiente alternativo a la institucionalidad. El concepto de cine hay que ligarlo al espectáculo, a la ganancia, al mercado, aunque sea alto.
El arte visibiliza, y más que representar, presenta los problemas y las aspiraciones de la sociedad. La televisión puede contribuir más a la divulgación de la Muestra para que llegue a todo el país.