Era de esperar que Ernesto Padrón no se quedara con ese largometraje que sedujo a espectadores de todas las edades, el Meñique en 3d, y publicara un libro: El arte de Meñique.
No nos asombra porque Ernesto ha sido durante años un historietista de alto vuelo con su Yeyín y el propio Meñique, pero también un teórico de su quehacer. Muchas revistas Zunzún articuló luego que sustituyera como director a Jorge Oliver Medina, padre de ese delicioso personaje que es el Capitán Plin quien, a propósito, presentó el tercer volumen de Contar y cantar, con cuentos inspirados en videos clips cubanos.
Ambos libros de dos zunzuneros, fueron un buen pretexto para reunir a un grupo de adultos, niños y niñas, en una sala del Pabellón Cuba, espléndida subsede de esta gran fiesta del libro.
Contar y cantar y El arte de Meñique pertenecen al sello Ediciones ICAIC, que desde hace algún tiempo ha dado cabida a libros de muñequitos vinculados al audiovisual.
En el caso del volumen firmado por Oliver se trata de cuatro cuentos que parten de sendas canciones infantiles: «Juan “me tiene sin cuidado”»,« La gata Mini», «Cleorrata» y «El gatico vinagrito», que dicen lo que no cuenta la canción. Las historias están acompañadas por ilustraciones relacionadas con los video clips.
El arte de Meñique, es una propuesta de lujo. En el prólogo, el reconocido crítico Luciano Castillo afirma: “Este hermosísimo libro, entonces, es una suerte de crónica que pretende sintetizar varios años de esfuerzos y consagración a una cinta incomparable, portadora de un encanto singular, que no queda en modo alguno a la zaga de otras producciones análogas recientes”.
Hojear el volumen, leer las imprescindibles notas es ver el nacimiento de Meñique tanto desde que era un sueño de Ernesto hasta que ya decidido en el empeño, comenzó “a fajarse” con los colores, el peinado, la sonrisa, la forma de caminar del dibujo animado que ahora nos conquista con su valentía y dulzura.
Padrón contó que la forma que debía llevar cada personaje fue estudiada con un grupo de menores. Por ejemplo, el cuento original dice que Meñique cabía en la bota de su papá pero ese tamaño no le gustó a los “consultores”, quisieron le llegara al hombro a la princesa. La secuencia de esos dibujos aparece en el libro presentado en esta feria.
En la introducción Padrón dice: “Hacer arte con las nuevas tecnologías requiere el dominio de muchos procesos complejos. Por eso, para explicarlos mejor, los acompañaremos de muchas ilustraciones y los iremos descubriendo, de a poquito, en varios capítulos. En ocasiones tendremos que emplear algunas palabras técnicas en inglés, porque son términos reconocidos en la mayoría de los países y es útil que los conozcan. Al invitarte a conocer nuestro trabajo, te estamos convidando a ser como el Meñique del cuento: siempre curioso ante la vida y experto en comprobar que “el saber puede más que la fuerza”.