Conocí a Milton Díaz Cánter en 1979 cuando era un mangón (todavía lo es) y pasamos el curso para periodistas en la Escuela Superior del Partido Ñico López.
Cuando me entregó el texto y las fotos, de esta entrevista, una tarde en mi casa, interrumpidos por mi adorada Déborah, una diablilla de ocho años, recordamos aquellos años de la Ñico, al brillante Luis Armando Salomón, a Dávalos, el delegado de aula, a Fujichiro y a casi todos los integrantes de un colectivo que fue una suerte de familia para estudiar, compartir un huevo frito o beber una cerveza. Milton prometió escribir sobre ese tiempo con su memoria fabulosa, pero no lo ha hecho. Con lo que me entregó lejos de quitarle pedazos he decidido publicarlo por partes, con complicidad de Hugo Edelqui, el alma del Portal de la TV.
¿Por qué esta decisión? Es una rica historia que merece ser conocida. Esta es la cuarta parte que va todo motor
IV
-¿Cuándo empezó tu programa A todo motor? ¿Es popular este deporte en Cuba?
-A Todo Motor ha sido otro de los grandes retos en mi vida. Por todas las limitaciones tecnológicas que cualquier realizador cubano enfrenta para mantener en pantalla. Pero también, y en ocasiones con mayor fuerza, por otras, de carácter subjetivo que van desde interpretaciones que rayan lo absurdo, en torno a estas actividades muy común en cualquier rincón del Planeta… El reto está dado, también, por el compromiso que se llega adquirir con el público para el que trabajamos, razón de nuestra existencia… La misma pasión y entrega que distingue al buen practicante de cualquier Deporte, está presente en algunos de los que se mueven en esta órbita; mientras que, para las mayorías, son eventos recreativos que convocan a personas atraídas por los espectáculos que implican… Incluso, una buena parte NO tiene los conocimientos elementales de la mecánica automotor; ni son propietarios de vehículos y hasta ni saben conducir… Algo similar, sucede –pienso yo- con una parte del público que asiste a un teatro para disfrutar con una buena propuesta de ballet clásico, como la tenemos a nuestro alcance, con cierta regularidad…
La idea de ATM rondaba en mi cabeza; faltaba el espacio en que permitiera a penas una sección, ni pensar en un programa como los que tenemos hoy… Los deportes a motor son añejos y constante en los medios de cualquier país… En nuestras condiciones, apareció TR-Deportes y a mediados de los 90, con una serie de eventos deportivos internacionales; como carreras de Karting: Habana Gran Prix de las Estrellas, cuyas versiones llegaron a contar con la presencia de grandes pilotos de Fórmula 1, de Fórmula Indy y de otras manifestaciones de NASCAR (Asociación Norteamericana de Automovilismo Deportivo), como fueron René Arnaux, Carlos Sáenz y Clay Reggadzone, entre otros; también, estuvo en uno de esos eventos el italiano Jáccomo Agostini, el piloto de motociclismo de velocidad que más título del Mundo ha logrado (14)… Aparecieron en nuestras costas los certámenes de Off Shore (aquellos de las gigantesca y potentes lanchas)… Otros similares que hicieron historias de Cienfuegos, Ciego de Ávila y Santiago de Cuba (entre las provincias que recuerdo ahora)… Los “Jet-sky”, o motos acuáticas, incrementaron la cifra millonaria de aficionados cubanos que convocaron estos deportes en nuestro país, a finales del pasado siglo… También, las manifestaciones del motociclismo Internacional, en las versiones de Velocidad y del Cross, respectivamente, que eran las de la divulgación exclusiva en nuestros medios… Y fue este ambiente el que creó las condiciones para que nuestro público dispusiera de un espacio periódico de Deportes a Motor en nuestra Pequeña Pantalla… A partir de manifestaciones nacionales (motociclismo y karting), comenzamos amplificar el acontecer mundial y hoy, 21 años después de estos primeros lances en TR-Deportes, contamos con las dos versiones semanales de A Todo Motor; los 27 minutos de los viernes y las transmisiones de Grandes Premios de los lunes que van desde 57 minutos, hasta una hora con 27 minutos los lunes; en dependencia del tema: motociclismo o Fórmula 1… Como en cualquier espacio de televisión, en cualquier lugar del mundo (valga la redundancia), cuidamos que el contenido editorial de nuestros programas respondan a las necesidades del exigente público cubano, pero con el apego incondicional al proyecto social que se construye en Cuba hace 58 años; a la Revolución, la que ha hecho del deporte para todos, no una consigna, sino que uno de los más auténticos derechos del pueblo, a la par del trabajo, la salud, la educación y la inclusión social… A los que suelen satanizar estas manifestaciones, siempre les recuerdo que la Revolución Cubana, en los tiempos difíciles de la guerra contra el dictador Fulgencio Batista, tuvo un momento especial, gracias a una carrera de carros… El Mundo puso los ojos en nuestra Isla, aquel 24 de febrero de 1958, cuando el gran campeón, el argentino Juan Manuel Fangio no largó en el II Gran Premio de la Habana, porque en la tarde-noche del día anterior había sido retenido por un comando del 26 de julio que frustro el show mediático que intentaba el sátrapa para atraer dinero en beneficio propio que, en realidad, siempre fue la gran motivación del triste célebre sargento-presidente… Siempre digo que en nuestro país, salvo las carencias tecnológicas propias de un país pobre (multiplicadas a la potencia “n”, por el criminal bloqueo estadounidense), tenemos las demás condiciones para el desarrollo de estas actividades. Me atrevería a decir, las más importantes: personas preparadas en todas las direcciones e instituciones aptas para regular la seguridad y orden que exigen; e –incluso- las de prestar servicios en un momento determinado… Todo lo que genere felicidad, participación y motivación de las masas, se puede organizar en nuestra sociedad, ¡seguro estoy!
Y es así que surge el espacio de la velocidad con motor en Tele-REBELDE (tengo entendido que es el primero de su corte en más de 60 años de historia de la Televisión Cubana)… A Todo Motor, primero como una sección (en los finales), de la revista deportiva dominical en Tele-REBELDE… Para mayor exactitud, el primer ATM vio la luz el domingo 10 de diciembre de 1995…
(Si desea leer la primera, segunda y tercera partes haga clip en estos link (iría link de parte uno, dos y tres )
(Si desea leer la primera y segunda partes haga clip en estos link (iría link de parte uno y dos )
http://www.tvcubana.icrt.cu/seccion-entre-tu-y-yo/2686-milton-diaz-canter-viaje-a-la-semilla-de-toda-una-generacion-3ra-parte